Los jardines polinizadores como praxis educativa en procesos de formación ambiental
La polinización zoófila facilita la producción de más del 87% de las especies de plantas con flores, así como de entre el 90 y 100% de algunos frutos y hortalizas (kiwi, cacao, vainilla, melón, sandía, calabaza, etc.) y, con un porcentaje menor, de alimentos como pepino, aguacate, durazno, almendras, etc., lo que coadyuva a la obtención de medicinas, biocombustibles, fibras, maderas, resinas, materiales de arte y para la construcción, entre otros. Asimismo, la polinización zoófila es coadyuvante de la conservación de ecosistemas saludables y de la generación de mejores condiciones para especies en peligro de extinción (Conabio, 2022; Collantes et al., 2023; Poots et al., 2010).
Sin embargo, los polinizadores y sus servicios han presentado graves afectaciones a nivel global y regional debido a una serie de prácticas antropogénicas que, por décadas, contribuyeron al cambio del uso del suelo, a la escasez del recurso floral y pérdida de hábitat, calentamiento global, deforestación, contaminación por uso de agrotóxicos y organismos genéticamente modificados, introducción de especies exóticas invasoras, enfermedades y patógenos (Collantes et al., 2023; Goulson, 2015; Vanbergen, 2013).
En reportes publicados por organismos multilaterales y nacionales se refiere una reducción importante en la abundancia y la diversidad de los polinizadores en distintas partes del mundo como resultado del deterioro ambiental y la destrucción por fragmentación y deforestación de su hábitat (Gobierno de México, 2021; FAO, 2009; IPBES, 2017; Schubert, 2015; Potts et al, 2010).
La conservación de los polinizadores está alineada con los compromisos internacionales de México en términos de sostenibilidad y biodiversidad. Los objetivos del desarrollo sostenible (ODS) de la Organización de Naciones Unidas, expresados en la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, también integran el cuidado de los polinizadores.
En ese contexto, en el año 2020 se impulsó la Estrategia Nacional para la Conservación y Uso Sustentable de los Polinizadores (Encusp), quedando establecido el compromiso de atender la problemática que afecta las metas de sustentabilidad y seguridad alimentaria. También la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) y la Secretaría de Educación Pública (SEP) (2021) firmaron un convenio de colaboración para desarrollar programas de educación ambiental para la sustentabilidad en instituciones educativas oficiales y particulares de todos los niveles.
Surge, por tanto, la siguiente pregunta de investigación: ¿Cómo impacta un jardín polinizador escolar el perfil ambiental de las y los educandos? Y fue por ello que, en el Centro de Investigación en Alimentación y Desarrollo (CIAD) se emprendió el proyecto de tesis titulado “Los jardines polinizadores como espacios de formación ambiental en contextos escolares de Sonora”, con el propósito de explorar cómo el uso pedagógico de un taller sobre los polinizadores, centrado en el conocimiento, cuidado y protección de la polinización zoófila, puede coadyuvar en mejorar la formación ambiental de las y los educandos.
El supuesto de esta tesis fue que, en efecto, los jardines polinizadores utilizados como estrategia pedagógica de educación ambiental impactan positivamente en el perfil ambiental de las y los estudiantes.
El proyecto fue apoyado por la Secretaría de Educación y Cultura de Sonora por ser pertinente en el marco de la Nueva Escuela Mexicana (NEM), particularmente en el programa Oasis Escolares impulsado por la Subsecretaría de Políticas Educativas y Participación Social en el eje de Educación Ambiental para la Sustentabilidad (SEC, 2022).
Se trató de un estudio de tipo cualitativo y alcance exploratorio-descriptivo que partió de diseñar una secuencia didáctica en torno a los polinizadores. La secuencia contempló doce sesiones de aproximadamente 40 minutos cada una, desarrolladas en el ciclo escolar 2023-2024 en una escuela primaria rural ubicada en una localidad de la cuenca baja del Río San Miguel, contando con la participación de las y los niños de esa comunidad.
Una sesión, por ejemplo, contempló la plantación de plantas con flor y cactáceas en el jardín polinizador, con su ficha vegetal y la fijación del hotel de insectos. Se observó que este ejercicio cumplió su función como alternativa pedagógica e innovadora al convertirse en un laboratorio viviente donde las y los estudiantes aprendieron de una manera práctica y participativa.
Entre los hallazgos se encontró que el jardín promovió el bienestar social escolar, ya que la creación de espacios verdes reduce el estrés, y se consolida en la conciencia social la importancia de los polinizadores por su papel en la conservación de la biodiversidad y en la producción de alimentos.
Los resultados mostraron el éxito de la secuencia didáctica. Antes de la intervención, las y los educandos tenían conocimientos, habilidades y comportamientos limitados respecto a los polinizadores y sus servicios, perfil que mejoró de forma gradual y paulatina en cada sesión.
Las y los estudiantes transitaron del desconocimiento e indiferencia por los polinizadores y sus servicios hacia el interés por participar en las actividades y procesos de siembra, regado y cuidados; además, expresaron interés por realizar un jardín polinizador en sus casas.
Se concluyó que los jardines polinizadores escolares utilizados como herramienta pedagógica contribuyen a mejorar el perfil ambiental de las y los estudiantes; es decir, sus conocimientos, actitudes y comportamientos de respeto y cuidado por la naturaleza, los polinizadores y sus servicios.

Referencias
Arizmendi, M. del C., Núñez, L. E., Meneses, M. del R., Rodríguez, C. I., Almeida, G., Navarro, L., Prado, B. C. y Berlanga, H. (2012). Jardines para polinizadores: una herramienta para la conservación. Secretaría de Desarrollo Institucional.
Collantes G, R. D., Del Cid, R. A., Santos-Murgas, A. y Atencio, R. V. (2023). Importancia de los insectos polinizadores en la sostenibilidad de los agroecosisitemas productivos. 3(2). https://orcid.org/0000-0002-7917-7663
Conabio. (2022). Polinización. Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad. https://www.biodiversidad.gob.mx/ecosistemas/procesose/polinizacion.
FAO. (2009). El estado mundial de la agricultura y la alimentación. Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación. https://www.fao.org/4/i0680s/i0680s.pdf.
Gobierno de México (2021). Diagnóstico. Situación actual de los polinizadores en México. Sader, Semarnat, Senasica, Conabio, Conanp.
Goulson, D., Nicholls, E., Botías, C. y Rotheray, E. L. (2015a). Bee declines driven by combined stress from parasites, pesticides, and lack of flowers. Science, 347(6229). American Association for the Advancement of Science. https://doi.org/10.1126/science.1255957.
IPBES. (2017). Pollonators, pollination and food production. Intergovernmental Science-Policy Platform on Biodiversity and Ecosystem Services.
Potts, S. G., Biesmeijer, J. C., Kremen, C., Neumann, P., Schweiger, O. y Kunin, W. E. (2010). Global pollinator declines: trends, impacts and drivers. Trends in Ecology and Evolution, 25(6): 345-353). https://doi.org/10.1016/j.tree.2010.01.007.
Schubert, D. R. (2015). “Se avecina un desastre alimentario”. Informe sobre agrotóxicos y transgénicos. Ecoportal.
Vanbergen, A. J. (2013). Threats to an ecosystem service: pressures on pollinators. Frontiers in Ecology and the Environment, 11(5): 251-259. Wiley Blackwell. https://doi.org/10.1890/120126.
Autores(as): Víctor José Rivera Rivera, egresado de la maestría en Desarrollo Regional del CIAD, y Beatriz Camarena Gómez, investigadora de la Coordinación de Desarrollo Regional del CIAD.
CITACIÓN SUGERIDA
Rivera Rivera V. J. et al (2025, 24 octubre). Los jardines polinizadores como praxis educativa en procesos de formación ambiental. Oficina de Prensa. Centro de Investigación en Alimentación y Desarrollo (CIAD). https://www.ciad.mx/los-jardines-polinizadores-como-praxis-educativa-en-procesos-de-formacion-ambiental/↗







